El coche del alemán fue pilotado por un piloto profesional de eSports, es decir, un experto en simuladores (SimRacer).
El piloto alemán reconoció haber hecho trampas al poner a un piloto profesional de eSports al volante de su monoplaza, una decisión inadmisible que le ha costado bastante cara.
El piloto de Audi está en el centro de la polémica tras lo sucedido en el último evento de la Fórmula E Home Challenge. El alemán ha terminado excluido y con una multa de 10.000€ que deberá pagar a una organización benéfica, para así también ayudar al objetivo de esta serie, que no es otro que recaudar fondos para UNICEF y su lucha contra el virus Covid-19.
Las sospechas de sus trampas empezaron cuando su cámara web se quedó en negro mientras se disputaba el evento, además, para más dudas, tampoco se presentó a las entrevistas posteriores a la carrera. Para finalizar y después de cuatro carreras sin sumar puntos, su monoplaza acabó en la tercera posición del podio, por lo que se vio obligado a reconocer su culpabilidad.
Daniel Abt no tuvo otra salida que reconocer los hechos y pedir perdón: «Me gustaría disculparme con la Fórmula E, con todos mis aficionados, mi equipo y mis compañeros por haber solicitado ayuda externa durante la carrera del sábado. No lo tomé tan en serio como debería haberlo hecho».