Histórico. Alex Palou se convirtió en campeón de la IndyCar, el primer español de la historia en ganar la corona de la máxima categoría de monoplazas americana.
Era el día más importante de su vida y estaba exactamente en la posición que tantas veces había soñado cuando era un adolescente. Y pese a la presión del momento, Alex no falló en la última carrera del año en el callejero de Long Beach. El piloto de Sant Antoni de Vilamajor de 24 años, conquistó América y lo hizo con la entereza de un rey veterano. No parecía que este fuese solo su segundo año en la Indy, el primero con un coche campeón, el del equipo Chip Ganassi.
Palou llegaba con una cómoda ventaja que le permitía evitar riesgos. Tenía 35 puntos de ventaja sobre el mexicano Pato O’Ward, y 47 de ventaja sobre Newgarden. Newgarden salía desde la pole y mantenía la primera posición en el arranque, pero ello no debía preocupar a Alex, ya que le bastaba con ser 23º para ganarle la partida en la general aunque Newgarden se llevara el pleno de puntos. El rival que más le podía complicar las cosas era el mexicano de McLaren. O’ Ward debía ganar a toda costa, llevarse todos los puntos extra, y aún así, a Palou le bastaba con ser 12º si eso sucedía. Alex, consciente de ello, optó por la mejor táctica, la de no meterse en líos.
Lo tenía todo controlado, pero en la vuelta 18 llegó el golpe definitivo. O’Ward tenía que abandonar por problemas mecánicos.
La carrera fue ganada por Colton Herta (Andretti).