Es el todoterreno más rústico de la firma británica. Se presentó en el Salón de Frankfurt y reemplazó al modelo más clásico de Land Rover.
Land Rover es una marca registrada y asociada con la aventura. Es además, la reinterpretación del siglo XXI de todo un icono del todoterreno del siglo pasado. El nuevo Land Rover Defender 2020 es un vehículo muy respetuoso con su pasado pero moderno y hasta minimalista en sus formas. Su imagen resulta familiar pero también novedosa, mientras que las señas de identidad del modelo original siguen bien visibles en el nuevo: mínimos voladizos delanteros y traseros, formas angulares y cuadradas, pequeñas ventanas alpinas en el techo, portón trasero con bisagras laterales y la rueda de repuesto colgada en el exterior.
Con su carismática silueta y su espíritu aventurero de siempre, llega para completar la dinastía de Land Rover en el universo 4×4 al unirse al lujo y el refinamiento de la familia Range Rover y a la versatilidad SUV del Discovery.
Al igual que su predecesor, se ofrece con múltiples configuraciones y variantes de carrocería. El 110 (versión larga, con 4,76 m y 5 puertas) contará con variantes de 5, 6 o 5+2 plazas con un espacio de carga detrás de la segunda fila de 1.075 litros y hasta 2.380 cuando la segunda fila está plegada, mientras que el 90 (batalla corta, de 4,32 m y 3 puertas) se ofrecerá con 6 plazas y versiones comerciales más funcionales y resistentes.
Como parte de su ya característica funcionalidad interior, al igual que el original, conserva elementos estructurales y sujeciones que suelen estar ocultos a la vista para aumentar la sensación de sencillez y practicidad. Además, uno de sus detalles más innovadores, el cambio de marchas en el tablero, posibilita la instalación de un asiento auxiliar central opcional delante para crear una fila de tres asientos, como en los primeros modelos Land Rover.
Con una carga máxima de 900 kg, carga en estática en el techo de hasta 300 kg, carga en movimiento en el techo de 168 kg, capacidad de remolque de 3.500 kg y una profundidad de vadeo de hasta 900 mm, el Defender 2020 se erige como el todoterreno definitivo para las expediciones y aventuras más extremas. Su nueva arquitectura de carrocería ofrece una altura al suelo de 291 mm y una geometría todoterreno (en el 110) con ángulos de ataque, ventral y salida de 38, 28 y 40 grados, respectivamente.
En cuanto a sus cualidades fuera de pista, Land Rover vuelve a revolucionar el panorama actual de los 4×4 con la innovadora tecnología Terrain Response 2 con un nuevo programa de vadeo y el primer sistema Configurable Terrain Response del mundo, que permite tanto a conductores expertos como a principiantes fuera del asfalto optimizar la tracción gracias a una función inteligente automática que detecta la configuración más adecuada. Su tracción permanente a las cuatro ruedas, el diferencial central y el bloqueo del diferencial trasero activo opcional garantizan agarre y capacidad de avance sobre cualquier tipo de terreno.
Para aumentar su capacidad de adaptación al medio, la firma británica propone un numerosos accesorios y “herramientas” con las que afrontar las condiciones más extremas: desde un cabrestante eléctrico con control remoto hasta una carpa de techo, pasando por toldos inflables resistentes al agua o barras de remolque y soportes de techo de todo tipo. Hay incluso la opción de instalar de fábrica una película protectora satinada para proteger la pintura exterior y evitar las rozaduras con arbustos en el campo o al estacionar en la ciudad.
En el apartado tecnológico, otra de las novedades destacadas del renovado ‘explorador británico’ es la incorporación en primicia del nuevo sistema de infoentretenimiento Pivi Pro con una interfaz más intuitiva y actualizaciones remotas por software inalámbrico desde cualquier lugar del mundo.
La selección de motores de nafta y diésel para el Defender 2020 en el momento del lanzamiento incluye un dos litros turbo de cuatro cilindros gasolina con 300 CV (P300) y un seis cilindros de 3.0 litros turboalimentado con 400 CV (P400) y la eficiente tecnología eléctrica Mild hybrid de 48 voltios. La oferta diésel está formada por dos versiones, de 200 CV (D200) o 240 CV (D240), basadas en un bloque 2.0 con dos turbocompresores secuenciales que certifica registros energéticos desde 7,6 litros de media a los 100 km con emisiones de CO2desde 199 g/km. En todos los casos la caja de cambios es automática de ocho relaciones. En 2021 llegará una versión con motor híbrido enchufable (PHEV).
La gama, que incluye los modelos Defender, First Edition y Defender X, así como la versión estándar o las versiones S, SE y HSE, ya está disponible para pedidos en Europa desde 55 mil euros.