Minimalista al máximo, se luce en su estado más puro.
(Mario Rosa – Tester Motortop)
Atrapado en su espíritu 100% racing, el Mini Cooper E me conquistó casi que de inmediato. No es fácil erogar bruta potencia para mantener vivo el ADN del modelo y a la vez, conseguir autonomía. Pues bien, la ingeniería alemana lo hizo posible. Al volante, sensaciones infinitas…
Antes de ponerme al volante del Mini Cooper Eléctrico, la pregunta fue: ¿podrá la versión electrificada transmitir ese ADN –en todo sentido- tan característico de la marca?
Un rato después de conducirlo, la respuesta fue contundente: “Si”
Tan es así que de los variados modelos eléctricos que he tenido la oportunidad de conducir para Motortop Medios, el Mini eléctrico es el que más me gustó. Con ello no estoy diciendo que sea el mejor pero indudablemente para alguien como yo que lleva el espíritu Racing en las venas, el Mini me puede en todos sus aspectos: aceleración, confort, chasis/suspensión, dinámica general sea en ruta o ciudad y…su clásico e inconfundible diseño.

Una puesta al día
Mini es una de esas marcas que todo el mundo conoce, pero que quizás pocos entienden. Su fama se debe, sobre todo, a su diseño y a su historial deportivo. Los primeros Mini lograron victorias importantes en escenarios míticos, como el Rally de Montecarlo. Ese pedigrí dinámico sigue vigente a día de hoy gracias a las colecciones John Cooper Works.
En consecuencia, el Mini Cooper E ha recibido en todos sus aspectos, un tratamiento deportivo.
Potencia, consumo, autonomía
Ahora bien, lograr mucha potencia y a la vez un consumo reducido para paralelamente generar autonomía, fue el gran reto que debieron sortear los ingenieros alemanes de BMW; marca que ya hace casi 25 años se quedó con el emblema británico.
Lo concreto es que la ingeniería alemana se lució porque plasmó un Mini exuberante en su rendimiento pero a la vez con notable autonomía aun en el modo más “rabioso” de conducción.
En cualquiera de las dos versiones, Cooper E y Cooper SE, las prestaciones son envidiables: el primero disfruta de una potencia máxima de 184 caballos y una autonomía homologada de 305 kilómetros. El segundo eleva las prestaciones na los 218 caballos de potencia con un rango de hasta 402 kilómetros gracias a una batería de mayor capacidad, 49,2 kWh frente a los 36,6 kWh del modelo de acceso. El rendimiento es notable, pues es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en apenas 6,7 segundos y alcanzar una velocidad punta, electrónicamente limitada, de hasta 170 kilómetros por hora.
O sea, un Mini con mayúscula; un Mini que hace gala a su delicioso pedigrí.

Las sensaciones al volante
Bueno, podría estar horas hablando de las infinitas sensacion4es de la versión eléctrica. He manejado Mini a combustión y en la versión eléctrica encontré las mismas e incluso, algunas mejores sensaciones como el caso de la brutal aceleración desde cero. Divino.
Acelerar, doblar, frenar… Todo es casi casi, como un auto de competición.
Para quien busca ese tipo de prestaciones y lo quiere hacer en modo eléctrico, el Mini Cooper Eléctrico es una opción perfecta.
El exterior
¿Qué podemos decir de su exterior? Es inconfundible y justamente, de eso se trata. Es más, buscando una mejor eficiencia energética, han limpiado todo lo superfluo de la carrocería. Con sus nítidas superficies planas, líneas elegantes y sus equilibradas proporciones, el exterior ha sido trabajado para crear una forma espectacular que irradia seguridad. Pero voy un poco más allá y digo “su exterior es un Mini hecho y derecho”, acaso volviendo a las raíces de aquellos primeros Mini británicos que inmortalizó el formidable Mr. Bean.
Un interior muy novedoso: OLED
A bordo del Mini, su habitáculo es lo que uno sabe que encontrar. Un bajo centro de gravedad. El auto es bajo –como cualquier otro Mini- y al acomodarse en la butaca, uno ya percibe el perfil netamente Racing.
Dos cosas llamativas: el volante de dos rayos y maravilloso grip y lo que me deslumbró: la pantalla finita y redonda colocada al centro del tablero (algo tan característico de la marca) que se ha transformado en algo revolucionario y sin precedentes.
Utiliza la más avanzada tecnología OLED, mide 24 cm de diámetro y tiene un vidrio de alta calidad que le confiere una peculiar imagen minimalista. Funciona como cuadro de instrumentos, pero también como centro de asistencia e infoentretenimiento.
De manera que Mini ha desarrollado la primera pantalla OLED circular extremadamente finita y que cambia de color según el modo de conducción que utilicemos.
Lo confieso, esa pantalla redonda y finita central con una increíble definición y bien fácil al tacto, me pudo. Divina.
Materiales interiores
Otra característica que me sorprendió y para bien es la calidad de los materiales interiores. Son nuevas texturas, extremadamente suaves al tacto, que se salen de lo tradicional pero preservando la calidad pero al mismo tiempo, combinando tramas en sus texturas para generar un ambiente interior diferente, nuevo, único en Mini.
Los materiales y sus diversas nuevas texturas están cosidos con una exclusiva técnica 2D
Muy bien. Ambiente interior único.


Todo lo demás está
Podría ser interminable la lista de ítems en cuanto a las ayudas electrónicas a la conducción y la tecnología ligada a la conectividad, entretenimiento y demás.
Concluyo rápidamente para no aburrir que al Mini Cooper Eléctrico en cualquiera de sus dos versiones, no le falta nada.
No obstante, destaco lo siguiente que me resultó sumamente práctico: si hay mucho tráfico, cuenta con control de crucero activo del sistema Driving Assistant Plus opcional. El MINI seguirá automáticamente al vehículo que vaya por delante, manteniendo siempre una distancia de frenado segura.
Lo otro, es el asistente de aparcamiento, que viene de serie, busca posibles plazas y realiza la maniobra para aparcar el vehículo con sólo pulsar un botón.

Resumen final
Simple pero a la vez sofisticado, el nuevo MINI Cooper eléctrico se presenta en su forma más pura.
Minimalista al máximo, conjuga de manera perfecta muy buena autonomía sin renunciar a su notable carácter que se traduce en una sola palabra: potencia.
Tips
+De acuerdo al modo de conducción usado, cambian los colores
+Modo Green.
Sostenible, simplificado y totalmente silencioso, es un modo de conducción muy eficiente para que la batería dure mucho más.
+Modo Core.
Un modo de conducción clásico y confortable, con un ambiente moderno y sofisticado. El que más usé.
+Modo Go-Kart.
Inspirado en el legendario John Cooper Works, es un modo de conducción más emocionante y con una estética deportiva que te subirá la adrenalina.
Me di el gusto de usarlo… Me sentí Santiago Urrutia por un rato…
+Carga de 10 al 80% de la batería en 28 mns
+Carga lenta de 0 al 100% de la batería en 4.30 horas