AC Cobra Series 1 electric, así se denomina la versión electrificada de un modelo cuyo origen se remonta a 1961; un clásico de todos los tiempos.
En 1901 se fundó AC, una empresa inglesa de automóviles que tiene en el Cobra como su creación más reconocida.
Sesenta años más tarde, en 1961, Carrol Shelby se puso en contacto con este fabricante para crear un deportivo que equipase un motor V8 de origen americano.
A principios de los 60, AC aceptó la propuesta de Shelby.
Tras intentar un pacto con General Motors, finalmente Carrol Shelby acordó con Ford la cesión del motor para su proyecto con AC.
La carrocería del AC adoptó el motor V8 de Ford y nació el Shelby Cobra.
El modelo original se vendió entre 1962 y 1967, pero aún hoy tanto AC como Shelby fabrican y venden cada uno por su lado versiones actualizadas del clásico.
Ahora los británicos salieron al ruedo con el AC Cobra Series 1 electric, la variante eléctrica, cuya estética es exacta a la original y que se vende con cuatro colores diferentes para la carrocería: azul, blanco, verde y negro.
El AC Cobra Series 1 electric tiene un motor eléctrico que desarrolla 230 kilovatios de potencia, cifra cuyo equivalente térmico son 313 hp.
La batería que alimenta el motor asegura una autonomía de unos 240 kilómetros. El peso del AC Cobra Series 1 electric supera en 150 kilos el del modelo original, aunque el fabricante garantiza que queda por debajo de 1.250 kilos.
El clásico electrificado es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros/hora en 6,7 segundos y de alcanzar una velocidad punta de 193 kilómetros/hora.
El fabricante actualizó puntos claves para la dinámica como la dirección y los frenos para que el clásico eléctrico cumpla con lo que se espera sin resignar su estética.
Por 152.000 euros se puede accdeder a uno de los 58 AC Cobra que se van a ensamblar.
¿Qué hubiesen pensado Carroll Shelby y Henry Ford II sobre este clásico, que ahora no hará el tradicional sonido del V8, ni tendrá olor a gasolina? Impensado por aquel entonces, la década del 60′.